La casa de Crisólogo Larralde fue testigo de los centenares de militantes que se sumaron a este emprendimiento, sin importar que rol les tocara cumplir, pero con la idea de sacar adelante a nuestro querido partido.
No queremos que la UCR siga siendo una maquina electoral, que es en lo que se ha transformado en los últimos años, queremos que vuelva a ser el radicalismo donde la militancia recobre total importancia, que podamos sumar los grupos que han quedado fuera del gran armado de siempre, con los cuales discutamos y marquemos el camino a seguir en la provincia.
Las internas en un partido no destruyen, sino que fortalecen, porque a través del sufragio el afiliado expresa su parecer y decide que camino hay que seguir. Esa es la función normal de un partido y no la toma de decisiones en un cuarto cerrado entre tres o cuatro personas. Si pedimos para afuera que se respeten las instituciones, comencemos por casa.
Así que el 10 de mayo tendremos elecciones, debemos militar mas que nunca y convocar a los afiliados que por una razón u otra se fueron a su casa dolidos. Señores, a trabajar sin chicanas y con mucha grandeza, seguro que los amigos de la CON y el MODESO harán lo mismo. No repitamos los bochornos anteriores. Dejemos bien parada a la UCR.
En estos días subiremos mas información de lo que fue la asamblea de Avellaneda.
NOTA 342: A ELECCIONES INTERNAS por el "flaco" Campero.-
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